Sigue la cadena

Tenía ratos de no postear nada de la cadena. Curioso que encontré algo que se acopla a lo sentido en éstos días

Resumo con una letra y una sóla voz la indecisión y la falta de vida en la que se mueve el resto
Es como si existiera una barrera autoimpuesta para evitar vivir
Los ideales infantiles, esos que fueron alimentados por generaciones que buscaban una línea de vida intrascendente, se hacen presentes en todos los ámbitos de la realidad que nos rodea
Generaciones completas que nacen, crecen, se reproducen y mueren
¿Es acaso ese el fin último y máximo para la mayoría? ¿Somos seres inanimados en una realidad que se inunda de conformismo?
Las tonadas siguen siendo las mismas
Las formas siguen creando entes errantes en un mundo que no es suyo
La actitud no vale más, sólo existe cuando las cosas vienen bien
El conformismo y la mediocridad crean redes que son buscadas y deseadas más que la vida misma
Soledad, pobre soledad, ¿por qué todos te temen, aún cuando sos más sabia que el tiempo mismo?
¿No es acaso el tiempo tu alíado perfecto?
Es más fácil creerse y tragarse lo magullado por otros, gente que desea gente para hacer más gente que buscará más gente
Los círculitos viciosos no son más viciosos si lo vicioso es normal y socialmente aceptado
Y ser uno con uno es la excepción que nunca nadie busca
Y te consideran sabio nada, simplemente por evitar ser todo, sin negar que el todo es parte de la nada
Somos nadies errantes, y el camino en busca de pureza se ve manchado por el camino mismo
Y hay de aquel que atreva a limpiar esos caminos, porque serán ellos mismos con sus “buenas intenciones” quienes lo ensucien más
¿Será acaso que si las gallinas comen maíz, cagarán poporopos?
¿Será que esas generaciones limitadas crearán algo diferente a vidas limitadas?
¿Por qué el ideal máximo que se persigue es aquello que nunca se obtendrá? Y no es acaso por falta de esfuerzo, sino más bien por inexistencia de intenciones
Y lo bueno es que así nos sentimos más especiales, y coexistimos en una realidad alejada de la realidad
Y nos sentamos bajo la sombra de la soledad, que es sólo mía…
Viajaremos al mundo de siempre jamás, y seremos quien dicte lo que no será

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