Realmente me considero una persona pacífica, a la vez que desprecio todo tipo de incitación violenta. Hace rato, disfrutando de una "refrescante" chela con un cuate en un bar que queda cerca de donde vivo ingresaron unos tipos con planta sospechosa y uno de ellos estaba armado.
Lamento mucho que la situación que vivimos en Guatemala nos lleve a vivir este tipo de experiencias, ya que aunque no pasó nada, siempre queda una sensación de incomodidad al ver a alguien armado y bebiendo.
Yo quiero mucho a mi país y espero realmente que la situación cambie, porque creo que la mayoría de chapines no nos lo merecemos vivir con estas sensaciones de inseguridad que nos quitan la tránquilidad mental y psicológica.
Ni modo, a seguir adelante...
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